En primera persona

Había una vez, una mujer... como vos y yo

Cada 8 de diciembre se celebra el Día de la Inmaculada Concepción, Fabiana es comunicadora y nos cuenta su testimonio personal de su amor incondicional a la Virgen María, honrándola con un programa de radio semanal dedicado a la Inmaculada.

Fabiana Gomez Sabio jueves, 8 de diciembre de 2022 · 08:27 hs
Había una vez, una mujer... como vos y yo

Había una vez una mujer, muy joven ella, con toda una vida por delante. Comprometida con una gran hombre que prometía hacerla muy feliz. Ambos planearon, seguramente, formar una gran familia, con varios hijos. Algo muy común. Pero un día, sus vidas cambiaron para siempre. Un llamado, un pedido, les hizo desviar sus planes. Así fue mi vida. Muy parecida a la de ella. Siempre con todo planeado, anotado, detallado para que todo saliera perfecto y dentro de lo esperado. Anotaba mis pendientes en una lista diaria para no olvidarme ni desorganizarme.

Decidí seguirla, honrarla con todo el amor del mundo. 

Pero, un día, un llamado cambió mi vida, tan organizada. Dios me pidió algo distinto a lo que tenía planeado. Planeaba tener varios hijos, quizás igual que ella, pero el primero no pudo ser. Dios se lo llevó con él. Y mi vida, tan organizada, parecía que se desmoronaba. ¿Cómo seguir? ¿Por qué a mí? Si hacía siempre lo que Dios me pedía. Igual que ella.

A partir de ese momento, me aferré a ella sabiendo que me entendía. Que había pasado por lo mismo que yo. Sabía que ella podía comprenderme, apoyarme, contenerme. Así que decidí seguirla, honrarla con todo el amor del mundo. A esta altura ya te imaginás, querido lector, de quién estoy hablando. Sí, de María. ¿Cómo transmitir a todos ese amor hacia ella? ¿Cómo hacerle saber a todos que ella está para cada uno de nosotros, sus hijos?

Si estás alegre o triste, siempre recurrí a María. Pedile lo que necesites. Aunque los demás te abandonen, ella siempre estará con vos. Afirma Fabiana.

Un día, una gran amiga, me propuso hacer un programa de radio en honor a la Virgen. Una radio chiquita de Capital. Lo hacíamos muy temprano los domingos. Fueron 2 años. Me mudé. Mi vida siguió. Tuve dos hermosos hijos. Siempre extrañando a aquel que no pudo ser, y el segundo de ellos, lleva el nombre de ella: Mariano.

Fabiana y su hijo más chico, Mariano Nicolás, en honor a María

Con el paso de los años, recurrí a otro grupo de amigas, para retomar aquel anhelo de llevar a María a la vida de otras personas. Así nació Reina del Cielo radio. Un programa de una hora, donde rezamos el rosario y contábamos la vida de algunos santos. Con el tiempo, llegamos a dos horas.

"Reina del Cielo" 

¿Por qué te cuento todo esto? Porque ella salvó mi vida. Después de tanto dolor, su propia vida, su entrega, su propio dolor, fue mi gran consuelo. Mi casa está llena de imágenes suyas. Siento que siempre me lleva de su mano y nunca la suelta. Me cubre con su manto cuando estoy triste y desganada. Y me acuerdo de las palabras que le dijo al indio Juan Diego, en sus apariciones de Guadalupe: “No tengas miedo, ¿acaso no estoy yo aquí, que soy Tu Madre”?

Ella está siempre, así la siento

En los buenos momentos riendo conmigo y en los malos, abrazándome y consolándome. Dándome la alegría de cada día y las fuerzas para afrontar los inconvenientes. Mi oración preferida: El rosario. El arma más poderosa del hombre y la debilidad de Dios. La escalera que une el cielo y la tierra. Con el rosario se ganan batallas, se unen las almas y se alegran los corazones.

Fabiana junto a Eugenia y Rafael, el equipo de "Reina del Cielo"

Si estás alegre o triste, siempre recurrí a María. Pedile lo que necesites. Aunque los demás te abandonen, ella siempre estará con vos. Y el rosario, es la oración que más le gusta.

No te vas a arrepentir, después me contas.

* Fabiana Gomez Sabio, es comunicadora y docente

Podés escucharla todos los sábados a las 8 de la mañana haciendo click aqui.

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