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Alberto está cansado y la tensión con Cristina ya no puede camuflarse

Varios periodistas y reconocidos columnistas del país aseguran que distintos voceros presidenciales y cercanos a la Vicepresidencia deslizan cada vez más rumores sobre las diferencias que hay entre el primer mandatario, Alberto Fernández, y su "segunda", Cristina Fernández de Kirchner.

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MDZ Política domingo, 21 de marzo de 2021 · 12:28 hs
Alberto está cansado y la tensión con Cristina ya no puede camuflarse
Foto: La Nación

La tensión entre Alberto y Cristina parece crecer y tomar dimensiones públicas, o por lo menos no camuflables. Periodistas acreditados en la Casa Rosada, voceros de la Quinta de Olivos, analistas, e incluso funcionarios del Gobierno señalan por lo bajo que las diferencias entre "ella" y "él" son cada vez más notorias.

La demorada designación de Martín Soria como ministro de Justicia ya denotó una oscilación en las decisiones presidenciales que dejó al descubierto que más que elegirlo para su Gabinete, se lo estaban colocando. Soria es netamente cristinista y Alberto, por su parte, ni siquiera estuvo de acuerdo con la salida de Marcela Losardo, a quien en un gesto de resignación le dio una palmadita y la mandó a París como embajadora de la Unesco. 

A la designación de Soria como ministro --que Alberto Fernández hizo entre dientes--, se sumó ahora la polémica entre Sergio Berni, ministro de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, y su homóloga nacional, Sabrina Frederic. Al primero, lo apoya Cristina y él es un expreso fiel de "ella", pero lo cierto es que el propio Alberto pidió la renuncia de Berni, el problema fue que no dio pie con bola, porque a Sergio lo banca la jefa. 

Beto Valdez, habitual columnista de MDZ, señaló que "hay mucho ruido en el círculo rojo" respecto de la fatiga de Alberto Fernández frente a las presiones de Cristina. Otro columnista de La Nación, Jorge Liotti, sostuvo que hay "en las filas del oficialismo una consigna muy inquietante: que Cristina no solo está disgustada con la gestión, sino que admite que se equivocó con la elección del presidente".

También se comenta que "se prendió fuego la esperada comida de reconciliación" que tuvieron Alberto y Cristina cuando se reunieron para tratar el tema de la designación de Martín Soria. Al parecer, el Presidente no estaba de acuerdo con esa designación y hasta amagó con retirarse. "De acá no se va nadie", le dijo la Vicepresidenta, según el columnista del diario Perfil, Roberto García.

Todo ello va teniendo sus efecto, incluso, este último columnista rescata tres episodios y señales causales del desgaste, que citamos textual:

  • En un año, Cristina ha desplazado funcionarios del Presidente y ocupó esos vacíos con sus propios fieles, es definitivamente una okupa serial.
  • Ahora avanza en privilegiar a Sergio Massa como padrino de Máximo y socio más poderoso en la trilogía oficial, parece que le sirve mucho más que Alberto.
  • El Presidente, agobiado por descontroles varios y un stress agobiante, se desbarranca en su vida personal: ha aumentado de peso (unos 15 kilos, por lo menos), se agita con problemas respiratorios que antes de la Casa Rosada ya lo afectaban y reitera, sin que nadie se lo pregunte, que nunca se va a separar de CFK. A la vice ni se le ocurre esa declaración. Para la psicología elemental.

Entre que Soria, flamante ministro de Justicia, no tuvo un buen debut, dado que tuvo declaraciones apresuradas a la prensa y encontronazos con jueces incluso antes de asumir, y que Cristina le gana terreno de poder a Alberto en decisiones como apartar o no a Berni, la relación puede notarse cada vez más tensa y menos productiva. Veremos cómo sigue la novela, mientras la Argentina entera solo espera una cosa: soluciones. 

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