Penal de Boulogne Sur Mer

El asesino de Alejo Hunau, imputado por estafar desde la cárcel

Diego Arduino operaba desde su celda en la cárcel de Boulogne Sur Mer. Luego de una denuncia, requisaron sus pertenencias y descubrieron que ofrecía falsamente materiales de construcción a través del Marketplace de Facebook.

MDZ Policiales
MDZ Policiales lunes, 20 de diciembre de 2021 · 21:01 hs
El asesino de Alejo Hunau, imputado por estafar desde la cárcel
Diego Arduino fue imputado nuevamente por estafas que realizaba a través de Facebook

Tras una denuncia, la justicia realizó un registro en una celda del penal de Boulogne Sur Mer e imputó a Diego Arduino, actual detenido por el homicidio del periodista Alejo Hunau, por la falsa venta de materiales de construcción que se ofrecían a través del Marketplace de Facebook. En este sentido, el hombre recibía dinero por materiales que jamás entregaba.

La denuncia muestra una modalidad que se viene repitiendo en los últimos meses: luego de conseguir la confianza de la víctima ofreciendo materiales a un precio levemente inferior al valor de mercado y promocionado mediante perfiles apócrifos en las redes sociales, el falso vendedor le solicitó al denunciante que le transfiriera $30.000 a una cuenta perteneciente a una billetera virtual, en concepto de pago por unas varillas de hierro.

Una vez realizada la transferencia, el supuesto vendedor desapareció y la mercadería nunca llegó. La investigación realizada por la fiscalía determinó que la cuenta a la que había ido a parar el dinero pertenecía a un interno de Boulogne Sur Mer, más concretamente a Diego Arduino, condenado por el homicidio del periodista Alejo Hunau

El comunicador Alejo Hunau.

Con esa información, el fiscal Flavio D'Amore ordenó la requisa personal del sospechoso y el registro de la celda en la que se alojaba en busca de mayores elementos de prueba. En efecto, tras practicar la medida, personal de la División Delitos Económicos de la Policía de Mendoza secuestró en la celda que Arduino comparte con otros dos internos, dos teléfonos celulares, seis tarjetas SIM, un cuaderno y papeles con anotaciones vinculadas al hecho investigado. 

Con estas pruebas, la fiscalía le imputó a Arduino el delito de "Estafa Genérica" (Art. 172 del CP). Luego buscarán extraer y analizar los datos de los teléfonos y chips secuestrados, a los fines de determinar si existen otros autores vinculados a la denuncia o si los mismos intervinieron en alguno de los tantos hechos denunciados en el último tiempo, en los que se utilizó el mismo modus operandi para engañar a incautos compradores.

Ante el crecimiento de este tipo de estafas, la Fiscalía de Instrucción N°7 recomienda a la población no realizar transferencias a personas desconocidas sin  verificar previamente la identidad de los supuestos vendedores.

El homicidio de Hunau, otro de sus crímenes

El crimen de Alejo Hunau (33) ocurrió el martes 23 de noviembre de 2004. Su cuerpo fue encontrado en su departamento de la calle Pedro Vargas entre Colón y Pedro Molina de Ciudad.

La investigación se orientó hacia última persona que había estado con el comunicador social: Diego Arduino. Además, en la escena del crimen hallaron sus huellas dactilares en un vaso y ADN en colillas de cigarrillos. 

De acuerdo con los médicos forenses, la víctima falleció por un golpe en la cabeza realizado con una botella que estaba en el departamento. En tanto, Arduino declaró que la noche anterior había estado con Hunau para venderle un perfume pero su excusa no resultó y fue procesado.

 En un polémico fallo en 2005, la Segunda Cámara del Crimen aseguró que la víctima tenía  “conductas sexuales desviadas” y lo absolvió.  Sin embargo, la madre de Hunau apeló la decisión y tras evaluar las pruebas, en 2007 la Justicia lo condenó a 16 años de cárcel por homicidio simple y robo.

En medio de la pandemia de coronavirus, el asesino del comunicador social fue beneficiado con el otorgamiento de la prisión domiciliaria. Si bien durante febrero de 2020 le habían rechazado el pedido, el cambio de decisión de la Justicia se relacionó con  el padecimiento de Arduino de una enfermedad respiratoria similar al Epoc, por lo que integró uno de los grupos de riesgo.

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