Datos de la UCA

El motivo por el que la pobreza en Mendoza "no crece" a pesar de la peor situación social

Los datos del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica (UCA) para el período 2021/22 marca una mejora en los números. El avance no llega a ser de un punto y prácticamente se mantiene en comparación con la última medición.

Diana Chiani
Diana Chiani martes, 30 de mayo de 2023 · 07:07 hs
El motivo por el que la pobreza en Mendoza "no crece" a pesar de la peor situación social
En un contexto inflación y de caída del poder adquisitivo de los salarios, la pobreza y la indigencia no subieron gracias a los numerosos programas sociales. Foto: ALF PONCE MERCADO / MDZ

El Observatorio de la Deuda Social Argentina (ODSA-UCA) sede Mendoza publicó su último informe de pobreza y observó una leve mejora en los índices relevados. En este contexto, advirtió que la pequeña baja en los indicadores de pobreza e indigencia por ingresos se debió a las diversas políticas sociales y no a un incremento en la calidad del empleo o los salarios.

El informe “Tasas de indigencia y pobreza por ingresos monetarios. Gran Mendoza 2017-2022” expresó que en los registros para el período 2021-2022, se observó una leve mejora de la pobreza (de 44,7 a 44%) y también de la indigencia (de 8,5 a 7,6%) en la población.

El informe destacó que, en especial en el último caso, se trata de una mejora más evidente, aunque “no necesariamente estadísticamente significativo. En este punto, expresó que “aunque se aprecia todo progreso, a pesar de ser pequeño, se debe tener en cuenta que las cifras se ubican en registros extremadamente elevados, que dificultan el desarrollo económico y social”.

Para la UCA, la leve mejoría de los indicadores se debe al efecto de las políticas sociales a través de los refuerzos de la asistencia social y al mayor esfuerzo productivo de los hogares. Nada tiene que ver con “la evolución de las remuneraciones y prestaciones en términos reales que son los factores que logran atenuar, o incluso revertir, la tendencia creciente de la indigencia y pobreza por ingresos”.

En este contexto, el economista José Vargas de la consultora Evaluecon, aclaró que el informe habla de los niveles de pobreza en términos monetarios, es decir, lo que se mide por Canasta Básica o niveles de ingreso. “Hay que entender la incidencia que tienen los planes sociales y los programas de ayuda del Gobierno nacional, que sirvió para mantener a la pobreza en los mismos porcentajes”, destacó Vargas.

Entre los programas de Protección Social de transferencias monetarias, el trabajo de la UCA menciona: Asignación Universal por Hijo (AUH), Asignación por Embarazo, becas Progresar y otros programas de capacitación y empleo como Potenciar Trabajo y Salario Complementario.

También considera dos programas implementados en el marco de la irrupción de la pandemia COVID-19 durante el año 2020 –como el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE)– y otras acciones que comenzaron a implementarse a partir de fines de 2019 –la Tarjeta Alimentar– atendiendo al empeoramiento de la situación social.

Perspectivas y definiciones

La UCA explicitó que la leve mejora de los números en el Gran Mendoza se debe a estos programas y no a la calidad de los empleos, ni la evolución de las remuneraciones y prestaciones en términos reales. Se trata de factores que logran atenuar, o incluso revertir, la tendencia creciente de la indigencia y pobreza por ingresos. Sobre este punto, José Vargas destacó que es probable que en los departamentos o lugares más alejados de la ciudad o Gran Mendoza la cantidad de pobres sea mayor. 

En el mismo sentido, sumó que habrá que esperar el impacto de la aceleración de la inflación a partir del segundo semestre de 2022, así como los niveles de indigencia en zonas alejadas de los centros urbanos; en donde probablemente sean más altos. Al respecto la UCA destacó que “ara la última parte del año 2022 se espera que los datos exhiban cierta ralentización de la actividad económica”.   

El informe considera indigentes a aquellos hogares cuyos ingresos no les permiten adquirir el valor de la Canasta Básica Alimentaria (CBA). La misma incorpora una serie de productos requeridos para la cobertura de un umbral mínimo de necesidades alimenticias (energéticas y proteicas).

Cuando habla de pobreza, se refiere a aquellos hogares cuyos ingresos se encuentran por debajo del umbral del ingreso monetario necesario para adquirir en el mercado el valor de una canasta de bienes y servicios (Canasta Básica Total o CBT).

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