Escasez de dólares

Los dos peligros que enfrenta la economía por el supercepo importador

El Gobierno nacional tomó una medida extrema ante la falta de dólares. Las empresas deberán financiar sus propias importaciones. Desde las industrias advierten que la medida puede provocar dos consecuencias negativas. Frenar el ritmo de producción y acelerar el proceso inflacionario

Horacio Alonso
Horacio Alonso martes, 28 de junio de 2022 · 08:37 hs
Los dos peligros que enfrenta la economía  por el supercepo importador

La falta de dólares llevó al Gobierno nacional a implementar un cepo importador extremo. Desde ahora y por tres meses gran parte de las empresas deberán financiar sus compras de insumos y productos en el exterior con divisas propias. La medida causó un fuerte impacto negativo en el sector empresario.

“Si bien era algo que se veía venir, porque la situación de las reservas es crítica, la noticia cae muy mal ya que será muy complicada la operatoria y sumara un problema más a los que ya existen para producir”, dijo a MDZ el director de una compañía multinacional.

Ayer, como ejemplo, durante una reunión de directores de cámaras de la UIA, había coincidencias sobre las complicaciones que surgirán para mantener el ritmo de actividad. La preocupación que existe en las industrias son las consecuencias inmediatas que tendrá la medida y el temor por que se extienda en el tiempo.

Por un lado, se estima que va a afectar los niveles de producción ya que no será fácil que todas las empresas tengan la misma facilidad para lograr crédito externo. “La búsqueda de financiamiento va a ser pesada y dependerá de lo que cada empresa pueda conseguir y por cuánto tiempo. Eso determinará las posibilidades de crecimiento”, señalaron desde una automotriz.

El otro punto a tener en cuenta es el tema de los precios. Como las empresas tendrán que esperar 180 días para recuperar los dólares al cambio oficial, es difícil saber cuál será su cotización y eso tendrá un efecto inflacionario.

“Ante la incertidumbre cambiaria, se recargarán los márgenes por cobertura para reponer mercadería e insumos”, advirtieron en otra compañía.

El panorama no es alentador y menos aún si se tiene en cuenta que lo anunciado por el Banco Central para todas las empresas es un sistema similar al acordado con el sector automotor hace dos semanas.

En ese caso, ante la falta de dólares para importar 0km y cubrir la demanda de los autopartistas para la compra de insumos en el exterior, se dispuso un mecanismo en el cual las terminales de autos importan unidades con financiación propia y esas divisas que no demandan se destinan a los autopartistas.

A dos semanas de su anuncio, hasta ayer no estaba completamente implementada la forma para que las terminales pudieran cargar sus declaraciones juradas. A esto se suma otro problema que es cómo se va a discriminar los dólares que deja de demandar cada automotriz cuando un proveedor abastece a más de una terminal. También hay muchas dudas sobre la coordinación entre los bancos comerciales y el Central para que el mecanismo funcione.

Las dificultades de este mecanismo ya implementado en el sector automotor es una muestra de lo que puede suceder ahora en todas las industrias y con mayor cantidad de productos.

En un comunicado, la entidad financiera informó que "las medidas extienden el sistema de financiación de importaciones a las realizadas bajo Licencia No Automática y a la importación de servicios y tendrán vigencia por un trimestre, para dar tiempo a la normalización del comercio exterior".

"Las pequeñas y medianas empresas quedan exceptuadas de las exigencias vigentes de financiar sus importaciones por un incremento de 15% respecto al año anterior, con un límite de hasta un millón", indicó la nota.

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