Desembarco país: Wado de Pedro se prepara para competir en la interna del Frente de Todos

Eduardo "Wado" de Pedro no deja de ser consciente de que este año el oficialismo tiene un desafío muy complejo si quiere seguir siendo Gobierno. Los fuegos internos y los números de la economía dieron por terminada la opción de que juegue Cristina Fernández de Kirchner y Alberto Fernández, y por ahora no parece ser distinto el camino para Sergio Massa, quien desde el ministerio de Economía obtuvo los peores resultados inflacionarios en tres décadas. 

Wado ostenta una serie de cucardas que el resto no tiene. Fue "cristinista" cuando lo más fácil era tomar distancia de la entonces alicaída Cristina Kirchner tras el triunfo de Cambiemos en 2015, con Buenos Aires incluida. Tiene una presencia en el llamado "círculo rojo" que le permite ser un gran interlocutor con dirigentes y empresarios con los que es mejor ni mencionar el apellido Kirchner a pesar de los rindes durante los tres periodos de Gobierno del matrimonio. Su militancia e historia de vida generan empatía en la mayoría de los sectores, y no cultiva el rencor en la política.

Es el ala intelectual y con familia agropecuaria, tercera generación de producción en Mercedes, donde gobierna su hermano de crianza, Juan Ignacio Ustarroz. Wado puede reunirse y sentirse cómodo en reuniones con la Sociedad Rural y el Grupo Clarin, algo que ni saben, ni pueden, ni quieren Máximo Kirchner y la mayoría de los militantes de La Cámpora.

Wado ahora deberá hacer los deberes para recuperar el voto independiente, por lo que será un hombre más presente en el campo y el interior que en otros lugares. Su relación con los gobernadores es muy buena, pero la estigma de su peronismo dogmático y adhesión sistemática a todas las ideas de Kirchner lo posiciona de forma negativa en el espectro independiente. 

Wado recorre un trayecto complejo. Sabe que Daniel Scioli jugará a todo o nada con Victoria Tolosa Paz, amiga personal de Alberto Fernández y la ministra que intenta domar los movimientos sociales todas las semanas, en este caso con acampe incluido. Tolosa encarnó la boleta que perdió en 2021 con Diego Santilli en Buenos Aires, pero tiene el apoyo absoluto de Alberto Fernández. 

Scioli se internará en La Matanza, donde viene impulsando más de 500 pymes para seguir vendiendo productos argentinos en Brasil, lo que repetirá como un mantra durante todo el año electoral. Más trabajo, más producción, menos pobreza, serán los ejes del embajador del país carioca.

Así entonces, Wado deberá también hacerse cargo del eje judicial, que Cristina Kirchner precisa resolver antes de enero, cuando formalmente cambie el Gobierno. El mundo de la Justicia es ampliamente conocido por Wado que fue parte del Consejo de la Magistratura y conoce el paño, incluso en caso de Luján, donde se reunió con funcionarios judiciales días atrás en medio de un conflicto que no para de crecer por la basura contaminante.