Indicios de diálogo

Suarez y el PJ negocian un gran acuerdo político de fin de año

El pacto podría incluir la modificación de la ley 7722, el endeudamiento para obras con fondos del BID y el Presupuesto 2020. Las conversaciones empezaron la semana pasada entre el gobernador electo y la cúpula del PJ. También charla con la oposición Mario Abed, el nuevo vice.

Redacción MDZ Online martes, 26 de noviembre de 2019 · 06:46 hs
Suarez y el PJ negocian un gran acuerdo político de fin de año
Cornejo y Suarez tienen estilos diferentes para la relación con la oposición. Foto: UCR

Rodolfo Suarez y la cúpula del justicialismo ya trabajan en un acuerdo político de fin de año que, si fuera fructífero, podría abrirles las puertas a la reforma de la ley 7722 y al endeudamiento para obras financiadas por el BID, además de la sanción del Presupuesto 2020.

El pacto se comenzó a discutir la semana pasada en forma secreta entre el gobernador electo, Anabel Fernández Sagasti y Omar Félix, diputado nacional y hermano de Emir Félix, el intendente de San Rafael.

Por su lado, el nuevo vicegobernador, Mario Abed, ha comenzado a atender "de a poco" a los referentes opositores en la Legislatura.

Si bien está por verse en qué termina todo, el inicio de las conversaciones tendrá esta semana un efecto concreto: no se volverá a insistir en el Senado en el tratamiento de la modificación de la ley que restringe la minería metalífera.

La reforma en cuestión, en caso de que se concrete, podría ser reflotada por Suarez recién después de que asuma. Presuntamente, antes de fin de año. Y en el marco de un pacto mucho más amplio. Todo dependerá de que se produzcan los acuerdos que empezaron a explorar hace pocos días el gobernador electo y el PJ. 

El peronismo muestra interés en que estas negociaciones no fracasen. Se nota al menos un cambio de actitud en sus filas. A su vez, Suarez ha comenzado a dar indicios de lo que él mismo había marcado como su diferencia a la hora de gestionar con Alfredo Cornejoel diálogo.

Claramente el partido opositor cerró todos los canales de comunicación con Cornejo, en forma definitiva, después de las elecciones provinciales.

El gobernador saliente se cansó de reclamar la aprobación en la Legislatura del endeudamiento "blando" del BID para la construcción de una planta de residuos sólidos en Las Heras (proyecto GIRSU), un acueducto ganadero para La Paz y una doble vía entre Rivadavia y San Martín. Atacó una y otra vez al peronismo por negarse al tratamiento de estas leyes, pero el justicialismo le devolvió el golpe con un rotundo "no" a sus aspiraciones y gestos de alarma por el nivel de endeudamiento que ya tiene la Provincia.

A pesar de su preocupación por la deuda, los peronistas decían que Suarez debía incluir estos proyectos en el Presupuesto 2020. Y según lo que ha trascendido hasta ahora, el gobernador electo podría estar de acuerdo en que el endeudamiento con el BID forme finalmente parte de la pauta de gastos del año que viene. 

Eso sí, la cifra total del endeudamiento de 2020 todavía no se conoce. Los equipos técnicos de Suarez están trabajando en la pauta de gastos, pero tienen el problema de que el presupuesto nacional todavía no se define.

Después de que Cornejo se peleara con el PJ por las obras del BID, vino la maniobra oficialista en el Senado para sacar en forma exprés la reforma de la ley 7722.

En ese momento, desde el justicialismo mendocino surgió un mensaje claro para el nuevo gobernador: "Suarez debe convocar a Anabel y a los intendentes y decirles todo lo que va a necesitar para iniciar su gestión: plan minero, presupuesto, endeudamiento, BID, etcétera. Todos los temas".

Entonces Suarez asumió el rol protagónico que el peronismo le pedía para sacar de la conversación a Cornejo. El gobernador electo no tardó en aceptar la solicitud del PJ y se juntó con Fernández Sagasti y Omar Félix para charlar todos los temas.

Ahora el peronismo esta entusiasmado. Llamativamente, no le dice que no a ninguno de los pedidos de Suarez, cuando antes le negaba todo a Cornejo. Ya sea porque Suarez es distinto a Cornejo, o porque el contexto del nuevo gobernador es diferente, hay señales de que la relación política entre el Gobierno y la oposición podría cambiar.