Gatillo fácil

La mamá de Blas Correas tras la histórica sentencia en Córdoba: “Demostramos que hubo violencia institucional"

Soledad Laciar, la mamá de Blas Correas, aseguró que la sentencia que se conoció este viernes, en la que fueron condenados a prisión perpetua dos policías acusados por el crimen de su hijo en Córdoba, la dejó conforme.

Gabriela Yalangozian
Gabriela Yalangozian sábado, 1 de abril de 2023 · 09:02 hs
La mamá de Blas Correas tras la histórica sentencia en Córdoba: “Demostramos que hubo violencia institucional"
Soledad Laciar, madre de Blas Correas, encabezó la conferencia de prensa tras la sentencia Foto: Twitter Amnistía Internacional Argentina

Luego de conocerse el viernes la sentencia en el juicio por el crimen del adolescente Blas Correas, ocurrido el 6 de agosto de 2020 en la ciudad de Córdoba, la madre de la víctima, Soledad Laciar. dijo que sentía que había “cumplido con su misión: demostramos que hubo violencia institucional”.

Así lo señaló en una conferencia de prensa que encabezó junto a Amnistía Internacional Argentina, en la que confirmó que estaba conforme con la condena que recibieron los 11 policías acusados por el asesinato de su hijo. Dos de los sospechosos cumplirán perpetua, mientras que los otros 9 penas menores por encubrimiento en el hecho. 

“A nivel personal, siento que mi misión está cumplida porque demostramos que existió violencia institucional. Un mes más, un mes menos de condena, no me cambia nada”, consideró Laciar,

Además, dijo que el fallo “fue mucho más allá” de lo que ella esperaba. “Las personas absueltas, si no tenían nada que ver, está bien. Nosotros siempre fuimos claros. No veníamos a vengarnos de nada", expresó Soledad en nombre de su familia.

Durante la conferencia de prensa, destacó también el apartado final que hizo el tribunal luego de informar a cada imputado su pena. En el, la Cámara 8va del Crimen reconoció a Blas, a los amigos que circulaban en el vehículo junto a él la madrugada que fueron interceptados por los policías y a la familia del joven fallecido como “víctimas de violencia institucional”.

“En lo personal, creo que este fue el punto más importante. Demostramos que esos oficiales que mataron a mi hijo, no eran dos locos que estaban en la fuerza policial, sino que existe todo un sistema aceitado con el poder político que se pone en marcha en este tipo de casos”, aseveró Laciar refiriéndose a los crímenes en manos de efectivos de la Policía, también llamados de “gatillo fácil”.

“Siempre ocurrían en barrios vulnerables, siempre le tocaba al que llevaba puesta una gorra. Pero cuando me arrebataron a mi hijo, entendí que esto le podía pasar a cualquiera”, enfatizó la mamá de Blas Correas. Así hizo referencia a la movilización que realizan organizaciones sociales todos los años para exponer las detenciones arbitrarias que realiza la Policía contra jóvenes de sectores humildes y que es denominada “La marcha de la gorra”.

 Laciar manifestó también que “el camino recién comienza” y que aún hay mucho por hacer. “Recién podremos ver un cambio si logramos que los legisladores modifiquen las leyes vigentes, porque un policía que encubre no puede tener seis años como máximo de condena. Un policía que encubre un delito grave, debería tener inhabilitación perpetua, algo que hoy no existe”, sentenció.

Soledad Laciar durante la lectura de la sentencia en el juicio por el crimen de su hijo. Foto: gentileza.

Por último, reflexionó: “Tengo la esperanza de que ahora algo va a cambiar. Somos muchos más ahora los que luchamos contra la violencia institucional. Esto recién empieza. No vamos a permitir que estos casos queden olvidados, nunca más”, aseguró.

La sentencia a la que arribó el jurado popular junto al tribunal de la 8va Cámara del Crimen este viernes permitió condenar a prisión perpetua a los dos efectivos que realizaban el control vehicular en la madrugada en la que balearon el auto en el que circulaba Blas Correas junto a sus amigos. Ellos son los agentes  Lucas Damián Gómez (37) y Javier Catriel Alarcón (33). En tanto, a otros 9 efectivos de distintos rangos se les dio penas de entre 1 y 5 años de cárcel por encubrir el homicidio y “plantar” un arma en el lugar para simular un “enfrentamiento con delincuentes”. Hubo 2 uniformados que fueron absueltos.

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