#8M

"Si yo denuncio y vos no hacés nada, sos cómplice"

En este año los femicidios aumentaron. A pesar de contar con leyes de avanzada en la región y numerosas políticas públicas destinadas a terminar con la violencia de género, nada parece ser suficiente. ¿Qué pasa después de la denuncia?Un relato de impotencia que se renueva cada día.

Victoria Chales
Victoria Chales lunes, 8 de marzo de 2021 · 11:40 hs
"Si yo denuncio y vos no hacés nada, sos cómplice"
Foto: NA

En lo que ha transcurrido del 2021 se produjeron 55 femicidios y 64 intentos según informan desde MUMALÁ (Mujeres de la Matria Latinoamericana) y el observatorio de violencias de género “Ahora que sí nos ven”. 

Los números  evidencian una realidad de abandono y complicidad por parte del Estado. El 29% de mujeres víctimas de femicidios había denunciado a su agresor previamente. El 19% tenía orden de restricción de contacto o perimetral y el 4% botón antipánico. 

A esto se debe sumar que el 17 % fue perpetrado por integrantes de las fuerzas de seguridad, un aumento del 5% respecto a lo registrado en el mes de enero (12%). Otro dato relevante es el aumento del porcentaje de denuncias previas que habían realizado las víctimas. Se observa un 29% frente a un promedio del 20 % de meses anteriores. 

En muchas oportunidades se radicaron numerosas denuncias. Tanto de parte de la víctima como desde su entorno. ¿Qué sucede en esa instancia? A veces no se accede a que la tomen en la comisaría como pasó con los familiares de Úrsula Bahillo (Buenos aires)  y Florencia Romano (Mendoza). En la historia que indignó al país y tal como lo reflejan los números, el asunto es más oscuro aún si tomamos en cuenta cómo creció la participación policial en estos delitos. A Úrsula Bahillo la asesinó un oficial de policía al que le habrían advertido que ella obtuvo la restricción de acercamiento.

Vale destacar que no todos los tipos de violencia especificados en la ley 26.485 son considerados delito. Por lo que a pesar de que la víctima radique una denuncia dejando constancia de estos hechos, no necesariamente se inicia una investigación al respecto. En el caso de que por ejemplo la mujer sufra violencia económica y por tanto no pueda alejarse del hogar que comparte con el agresor, se debe recurrir a instancias no judiciales. Aquí es dónde entran las oficinas de género de los municipios. Ahora bien, si se acercó a la comisaría a pedir ayuda, esta información debiera ser correctamente brindada para que esa mujer reciba la asistencia necesaria.

Otra situación frecuente es la amenaza. Las mujeres que padecen violencia de género y sienten que su vida está en riesgo, pueden realizar un pedido en el  juzgado familiar de alguna medida de protección. Aunque se recomienda ante un riesgo inminente llamar al 911, es importante saber que hay una forma en que el Estado debiera garantizar que el agresor no vuelva a acercarse. Esto sería de gran ayuda si se cumpliera. Lamentablemente hay muchos casos en los que aún cumpliendo con todos estos pasos, el victimario accedió igual a la mujer y generó el más violento desenlace: femicidio. Aquí vale recordar el caso de Guadalupe Curual que fue apuñalada en el centro de Villa La Angostura a pesar de tener la restricción perimetral y tratarse de un pueblo pequeño.

#8M: "Si yo denuncio y vos no hacés nada, sos cómplice"

Desde Audiovisualas mendocinas, una organización de mujeres del sector audiovisual, se produjo un video para este 8 de marzo en el que se señala ese enorme vacío entre la denuncia de una mujer que sufre violencia de género. Ella va y denuncia. No se la asiste adecuadamente. Aparece muerta al poco tiempo. ¿Qué sucede en ese trecho entre el pedido de ayuda y el femicidio?

Audiovisualas mendocinas retrata muy bien esta historia que se repite en todo el territorio argentino. Este grupo que recientemente dirigió tres de las “Historias de Vendimia” cuenta en este material hecho en especial por el 8M la desidia de Juana (19). Ella es una joven estudiante de Química de primer año que no logra escapar de su ex pareja. Su amiga Lucía lo sabe. Juntas incluso van a radicar la denuncia después de recibir golpes y “zamarreos”. El vacío de vuelta. Ahora Juana participa de los titulares que se acumulan hasta el hartazgo.

 

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