Clavelina, la planta rastrera que te deslumbrará en la primavera
Esta planta destaca por su imagen y su tonalidad. Se trata de una rastrera y podrás disfrutarla esta primavera con los cuidados específicos
Mientras en el Hemisferio Sur las temperaturas empiezan a bajar y las hojas de los árboles se caen, en el norte se acerca la primavera. Falta muy poco para este momento y los jardines comienzan a tomar el característico color verde de la época. Así también, muchas familias empiezan a prepararse para ver sus patios repletos de flores de colores. Entre ellas, podrás tener a la clavelina, a la cual podrás mantener con estos consejos.
La clavelina, también conocida como clavel del poeta o dianthus barbatus, es una planta rastrera cubre suelos que llega a tener ramilletes con numerosas flores, lo cual deleita a muchos por el colorido que aporta al jardín. Además de esto, cuenta con el beneficio de que es muy resistente y fácil de mantener con estos cuidados.
Iluminación
Un primer aspecto a tener en cuenta y no perder de vista si quieres tener una clavelina en el jardín, es que esta planta requiere de buenas dosis de sol directo. Es por esto que lo mejor es que la pongas en el patio o bien en el balcón o la terraza, siempre que cuenten con buena iluminación natural. En relación a eso, debes saber que podrás cultivarla en el interior de tu hogar, aunque en este caso, tendrás que cuidar de dejarla cerca de una ventana o donde pueda contar con este requisito.
Riego
Como todas las plantas, la clavelina necesitará que la riegues. En este punto, no debes perder de vista que la cantidad de agua que le entregues debe ser abundante, en especial en los meses más calurosos. En tanto, en invierno solo tendrás que regar esta parte del jardín una vez a la semana aproximadamente. Y no olvides evitar los encharcamientos, dado que esto puede devenir en resultados peores a la falta de agua.
Abono
Un tercer cuidado a mantener con tu clavelina, es el abonado. Este aspecto es crucial, dado que le otorgará vigorosidad a tu planta y a todo el jardín. El mejor momento para abonarla será la primavera, mientras florece. Necesitarás un producto específico para plantas en flor, que se consigue en los viveros, o bien compost casero.