Entrevista

Florencia Freijo, una pésima feminista

Justamente, como una "pésima feminista" se define en su biografía de Instagram la escritora y politóloga Florencia Freijo. Presentó un libro llamado Mal Educadas, que es récord en ventas, y cuenta por qué se describe como la peor feminista.

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MDZ Radio domingo, 31 de octubre de 2021 · 07:16 hs
Florencia Freijo, una pésima feminista
Florencia Freijo es la autora de Solas (aún acompañadas) y de (Mal) Educadas. Foto: Instagram

La politóloga y escritora feminista Florencia Freijo presentó en Uno Nunca Sabe Mal Educadas, su último libro en el que cuenta cómo durante 4 mil años de historia se educó a la mujer con un patrón diferente al de los hombres. Esta joven, que se define como "Pésima Feminista" y que de hecho a veces es criticada por otras "ramas del feminismo" -si es que cabe tan diferenciación- se mostró poco positiva sobre la "lucha" de las mujeres en la sociedad.

En referencia al libro, Florencia Freijo contó que desde la antigüedad, en estos 4 mil siglos de historia, la educación tuvo un rol fundamental para que la desigualdad se sedimente. Es que en la época greco romana ya se dividía la educación en mujeres y hombres, de acuerdo a una determinada función social y a una creencia de quiénes eran en ese momento figuras de autoridad que construían el conocimiento válido, lo que hoy llamaríamos conocimiento científico: filósofos, matemáticos, como Sócrates, Platón y otros. "Ya había una división, entendiendo que las mujeres estaban destinadas a cuidar, amar y reproducirse. Y esto está impregnado al día de hoy".

"Se las educaba para que sean buenas mujeres, madres, esposas, amantes. No me refiero al ser buenas personas, sino a sostener el mandato de la bondad en el sentido de la disposición hacia el otro. De hecho, las mujeres estamos educadas para amar sin condiciones. Justamente así se llamaba el libro: 'Mal Educadas para amar sin condiciones'. Pero por cuestiones de diseño no entraba", comentó riendo.

Esa educación de bondad, dice Freijo, es "para ser buenas en el sentido de no quejarnos. Eso es una realidad que se nos impone, pero sin sentir que se nos impone. Eso después hace que elijamos cosas sin saberlo. Porque lo que nos gusta, por lo general nunca está por fuera de la norma, porque el costo de salir de ella es alto", reflexionó.

Consultada sobre si ella no ve cambios en la generación de jóvenes de 20 años, Florencia Freijo no fue positiva. "No sé, me agarrás un poco pesimista. Lo miro con muchísimo cuidado porque siento que el discurso de la igualdad se volvió moda, lo cual hace que en la industria cultural se adopte como el discurso de lo correcto. Pero en la práctica nos falta un montón para internalizarlo. Lo veo, porque esa gente de entre 20 y 30 años está todo el día insultando mujeres en Twitter. Muchas que se supone que son militantes feministas, siguen con la mirada conservadora de que una mujer le debe a otra más que a su propio marido", mencionó haciendo referencia al caso Wanda/Icardi/La China.

Cada nueva edición de Mal Educadas se agota en pocos días.

"Esas cosas me sacan el positivismo. Pero además estamos en círculos muy endogámicos, donde pensamos que el feminismo o las teorías de igualdad están en boga y después te das cuenta en redes que varones jóvenes, de 14 a 18 años, sostienen su discurso ridiculizando el discurso de las feministas. Estos que están con la moda del liberalismo y de las criptomonedas", siguió.

Además mencionó que también ve dentro del feminismo quiebres "entre nosotras. Y ahí te das cuenta que falta muchísimo para cambiar".

Consultada sobre por qué cree ella que se vende tanto su libro, Flor Freijo respondió: "Es difícil decir por qué se vende, pero sí puedo decir a lo que yo apunto para que tenga llegada. Yo no escribo desde una mirada tradicionalmente feminista, que en realidad son las feministas hablándoles a otras feministas, sobre cómo tiene que ser el mundo feminista. Eso me aburre porque siento que es una mirada entre mujeres, endogámica, con un lenguaje muy académico y con poca llegada".

De aquello, el ejemplo más cercano en el tiempo que tenía fue que esa misma mañana "una mujer me dice que la está amenazando el marido de muerte, y no lo quiere denunciar miedo a perder los alimentos. Esa es la realidad: mujeres que no tienen para comer, son golpeadas, no las atienden en los juzgados, se sigue vendiendo la sexualización de las mujeres como algo del orden de la libertad, las niñas educadas con videos de YouTube tremendos". 

"A mi me interesa eso y soy muy criticada dentro del feminismo, porque me dicen que hago un feminismo para mujeres y por supuesto que sí. Sobre todo hago un feminismo para mujeres heterosexuales, porque para mí lo que pasa en los vínculos amorosos entre un hombre y una mujer son un factor de desigualdad para la mujer. Eso no invalida otras luchas. Aún hay chicas que viven situaciones a temprana edad de violencia de género que todavía no saben reconocer como tal. Chicas de buena posición económica y educadas.  A mí me interesa estar con esas mujeres", concluyó la autora de Mal Educadas.

 

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